Columna semanal Diario Cambio: Dra. Cecilia Eguiluz
Dólar a la baja, sus causas y ¿cómo nos afecta?
Es habitual que los uruguayos tengamos presente la cotización del dólar americano, algo que se explica fácilmente porque vivimos en un país dolarizado. Nuestra balanza comercial, netamente exportadora, nos ha hecho vivir en esa lógica la cual tenemos muy incorporada, por lo que siempre estamos atentos a la pizarra de cotización de la moneda americana.
Hace pocos días leíamos la noticia de que los exportadores uruguayos reclaman fuertemente una intervención estatal para detener el atraso cambiario. En nuestro país el precio del dólar cotiza a la “baja”, de hecho es una baja histórica de la moneda americana, contraria a lo que está sucediendo en el mundo.
Lo apreciamos todos los días, un dólar que rompió el piso de los 40 pesos uruguayos y sigue con una tendencia a la baja, mientras que en otros países la moneda americana se ha visto fortalecida. El sector exportador uruguayo comenzó a pedir con fuerza la intervención del Banco Central del Uruguay (BCU) para controlar la caída del dólar, lo cual sin duda, ha afectado, para mal, la competitividad de nuestros productos.
Por su parte el BCU, a través de su política monetaria con aumentos de intereses en pesos y en unidades indexadas, pretende regular la inflación, algo que en los hechos no ha dado el resultado que esperaban.
A este reclamo del sector exportador el BCU argumentó que el dólar estaba bajo porque nuestro peso uruguayo es muy fuerte y que eso se debía a dos componentes fundamentales, uno de ellos el aumento en las exportaciones y el otro la gran cantidad de inversiones inmobiliarias que se están dando en Uruguay. Lamentablemente ambos argumentos, cuya teoría seguramente esté abonada por la obsesión en creer que la política monetaria de nuestro país se maneja como el tesoro americano, no tiene una correlación directa con la realidad nacional.
Primero, porque en los últimos meses del año 2022 las exportaciones de Uruguay cayeron en comparación con periodos anteriores y segundo, porque las inversiones inmobiliarias, tan trascendentes, seguramente estén concentradas en algún departamento costero o son proyectos que no han tenido concreción en los hechos.
Estos argumentos del Banco Central omiten datos de la realidad, y esa situación fue desnudada con claridad por el Senador Manini Rios en el Senado de la República, quién con voz contundente dijo: “…cuidado con los especuladores…” El Senador Manini Ríos precisamente con su intervención rompió el silencio cómplice que existe sobre este tema y manifestó lo que es un secreto a voces, y es que, en nuestro país, millones de dólares de capitales extranjeros se están vendiendo permanentemente para comprar letras de regulación monetaria en pesos o en unidades indexadas.
Esos capitales extranjeros afectan el mercado de divisas, vendiendo dólares por millones bajan la demanda por lo que claramente se mantendrá a la baja el precio del mismo; compran letras del estado uruguayos porque las mismas otorgan un interés altísimo tanto en pesos como en unidades indexadas generando ganancias anuales de hasta el 20% y 25%, intereses que ningún banco pagaría por colocación anual. Estos capitales extranjeros, como los llamó Manini Ríos “especuladores”, no generan ni un puesto de trabajo en nuestro país, son tentados a seguir interviniendo en el mercado con la connivencia de un Banco Central del Uruguay que, una vez más, mira para el costado decidiendo no intervenir en la regulación monetaria que de hecho se está dando a diario a cargo de capitales extranjeros.
Este manejo de la política monetaria hace que los intereses en pesos y en unidades indexadas aumenten, haciendo tentador vender dólares para comprar letras en estas monedas. Al final del día la baja del dólar y el aumento de las tasas de interés en pesos y en UI no solo afecta a los exportadores sino a todas las personas y a las pequeñas o medianas empresas que tienen créditos en esas monedas. Por ejemplo, si un individuo tomó un crédito en UI equivalente 9 mil dólares en diciembre de 2021 y pago regularmente sus intereses hoy su deuda en UI va a equivaler a unos 11 mil dólares, creciendo así la situación de endeudamiento dada la baja del precio del dólar por los componentes que hemos manifestado.
En definitiva la no intervención del BCU y la intervención de los vendedores extranjeros de dólares, manteniendo el precio a la baja de esta moneda generan una situación parecida a la que se vivió previo a la crisis del 2002, afectando a todos. Por lo que debemos estar atentos a la voz clara pero solitaria del Senador Manini Ríos quién está poniendo este tema en el centro de la agenda política y económica, para visualizar que las políticas monetarias que a veces parecen tan lejanas tienen una implicancia en el bolsillo de todos los uruguayos, no solo en el de los exportadores.
Fuente: Diario Cambio de Salto